Aquí está el primer fofucho-regalo para un papá de «armas tomar».
Jesús, el carnicero. Regenta una carnicería muy familiar desde hace unas decadas. Un hombre simpático, divertido, sonriente, que trata a sus clientes con una gran amabilidad y alegría, por eso, repiten y repiten y repiten… (además de tener una gran carne).
Su hija, su nieta y su yerno querían hacerle un regalo muy especial, una sorpresa que recordar y muy diferente, así que rápidamente pensaron en mí. Unos cuantos datos, un poco de imaginación y… Mini-Jesús, el carnicero.
Tengo constancia de que ha gustado mucho.
Espero que vosotr@s disfruteis de esta fotografía.